Mapa conceptual B.6.
martes, 17 de febrero de 2015
MESA REDONDA (B.6.)
La pedagogía gestáltica. Origen y principios básicos.
Para entender la
pedagogía gestáltica, antes debemos ver cómo surge esta teoría y distinguir
bien entre la psicología y la pedagogía gestáltica. La psicología gestáltica
surge a principios del siglo XX en Alemania, en un contexto en el que aparecen
nuevas corrientes psicológicas como el funcionalismo y el conductismo. Son
considerados padres de esta corriente Max Wertheimer (1.880-1.943), Wolfgang Köhler
(1.887-1.967) y Kurt Koffka (1.886-1941), quienes enunciaron las leyes de la
percepción. Como indica el psicólogo Guillermo D. Leone
Estas leyes enuncian principios generales, presentes en cada
acto perceptivo demostrando que el cerebro hace la mejor organización posible
de los elementos que percibe, y asimismo, explican cómo se configura esa
"mejor organización posible" a través de varios principios. (2009)
Algunos de estos
principios son el principio de semejanza, principio de proximidad, de simetría,
de continuidad, de dirección común, de simplicidad, de relación entre figura y
fondo, etc. No vamos a entrar a definir cada uno de ellos, pues no es lo que
nos concierne, sin embargo, lo que ha de quedar claro es que el axioma que
engloba o que ilustra el planteamiento de esta corriente lo recoge la frase de Köhler: El todo es distinto a la suma de sus partes. Este principio, es
también la base de la pedagogía gestáltica. La pedagogía gestáltica, también
conocida como pedagogía de sistemas, surge tras la aplicación en el campo
educativo de algunas de las aportaciones de un pedagogo y terapeuta alemán
llamado Bert Hellinger. La pedagogía sistémica o de la Gestalt parte del
concepto de sistema, que es definido como: conjunto de elementos en interacción
entre ellos y de forma conjunta con el entorno. (Traveset Vilaginés, 2007) Así, cualquier
elemento puede estudiarse aisladamente pero solo obtendrá significado en la
medida que sea considerado parte integrante de un todo. Por ello, entenderemos,
por ejemplo, un centro educativo como un sistema mayor, dentro del cual existen
diversos subsistemas. Volvemos a emplear de nuevo las palabras de Mercè Traveset para terminar
de aclarar esto:
Posibilita a los docentes mirar la realidad educativa como un
todo vinculado a los sistemas familiares, sociales, culturales e históricos del
alumno y cómo ello influye y está en la base de los procesos de enseñanza-aprendizaje.
(…)La pedagogía sistémica es el arte de contextualizar y de enseñar desde una mirada amplia que nos permite ver la organización, la interacción de los
elementos de la escuela y la estructura espacial que conforma, el lugar y
funciones de cada uno de sus elementos así como las pautas que conectan a la
familia con los diferentes elementos de la escuela. (2007)
¿Pero cómo realizan esto?
Plantean que, no sólo el docente, sino todo el que esté relacionado con el ámbito
educativo, amplíe la mirada y respete los diferentes contextos, esto es, en
primer lugar tener conciencia de que cada alumno/familia/trabajador/docente proviene de un contexto determinado,
generación y cultura.
Hablan también del
agradecimiento y la admiración como valores para poder aprender. Consideran que
la admiración es la única emoción que puede unir a los individuos elevándolos.
Ya decía Descartes que la admiración ocupa el primer lugar de las pasiones del
alma, que admirar significa honrar. Por ello, la admiración puede motivar el
deseo de aprender o conocer, al mismo tiempo que puede ayudar a conservar la
identidad. Por otro lado, destacan la falta de coherencia entre la comunicación
verbal y la no verbal, consideran que ésta es una de las primeras causas de muchos conflictos en las relaciones
interpersonales. Así, desde esta pedagogía dicen que ponen mucha atención en
todos los elementos de la comunicación, tanto en lo que es llamado la parte
lógica (palabras y el lenguaje verbal) como en la parte analógica (lenguaje
corporal, voz, expresión, postura, distancia, pausas, información inconsciente,
etc). Al mismo tiempo, hablan de la regulación emocional y de los límites, es
decir, aprender a modular emociones, a desarrollar las competencias sociales y
relacionales y a controlar impulsos. Por esto, comprenden que han de basarse en
un estilo educativo en el que cada acción tenga un sentido y crear un currículo
específico para dotar de más recursos y desarrollar la inteligencia emocional. (Traveset Vilaginés, 2007) Y por, último,
trabajar en la inclusión y en la permanencia. Esto quizá es lo que más
destacan, pues es lógico, si entienden la educación como un sistema en el que
hay diversos subsistemas es importantísimo que todos los elementos del sistema
tengan este sentimiento y se sienta partícipes de esto, es decir, que entienden la educación como una empresa común
en la que todos trabajan.
Evidentemente, como
futura docente, estoy totalmente de acuerdo con esta última afirmación, y en
general, con la mayoría de las cosas que plantea esta pedagogía. Sin embargo,
bien es cierto, que por una parte me resulta que sus planteamientos son algo
lógico o razonable que quizá muchos buscamos
sin ponerle esta etiqueta. No es mi intención en ningún caso quitar mérito o
infravalorar esta pedagogía. Hay muchos aspectos, destaco el poner el
agradecimiento y admiración como valores para aprender y la regulación
emocional, que considero que es realmente necesario recordarlos, resituarlos,
revisarlos y volverlos a poner en marcha. Al mismo tiempo, me parece que esta
pedagogía, en cuanto al docente, requiere una implicación muy fuerte que
supongo no es fácil mantener constante. Creo que esta visión global de la educación
ahora mismo no está presente en muchos aspectos, al menos en nuestro sistema
educativo. Un ejemplo de ello es la separación total de las disciplinas, el que
se dé mucha más importancia a ciertas materias sobre otras, el trabajo
individual de los alumnos, etc. es una lástima, pues, como siempre, sabemos la
teoría pero de ella a la práctica hay un
salto que todavía tenemos por delante. Creo que dicha visión puede impulsarnos
para saltar y poder avanzar.
Referencias
bibliográficas:
Leone, G. D. (2009). Guillermo
Daniel Leone. Recuperado
el 10 de 1 de 2015, de Guillermo Daniel Leone: http://www.guillermoleone.com.ar
Traveset Vilaginés, M. (2007). Pedagogía
sistémica: fundamentos y práctica. Barcelona: Graó.
miércoles, 4 de febrero de 2015
'Graphic Work'
En la Galería Benlliure, Calle Cirilo Amorós, 47. (Horario: de lunes a viernes, de 10 a 14 horas y de 17 a 20:30 horas.)
MESA REDONDA (C.1.)
Definición de "didáctica".Agentes implicados en un proceso didáctico.
Al indagar acerca
del concepto de didáctica, vemos que es un término tan empleado como definido. Nos encontramos ante un término no unívoco que ha variado mucho en el
transcurso del tiempo y del contexto en el que se ha encontrado. Es por esto,
que señalar una única definición no sería lo más adecuado puesto que estaríamos
obviando, o solo dando por válidos, los determinados paradigmas de
interpretación o niveles de abstracción de los que proviene la definición. Es
decir, descontextualizaríamos la definición o reduciríamos la didáctica a un
contexto específico.
Sin embargo, para comenzar con un
primer acercamiento a la definición podemos resaltar dos cosas: en primer
lugar, tras el análisis etimológico del término, encontramos que la didáctica
trata “lo relativo a la enseñanza”. El término deriva del griego y en él encontramos la raíz “Da” que se asocia a enseñar, estar
instruido, aprender, conocer, docto, sabio. Además aparece una gran familia
léxica con términos como didask, theaon, didasko, didaskalos, didaktiker cuyos
significados respectivamente son: mostrar, contemplar, enseñar, maestro,
perteneciente a la enseñanza. En segundo lugar, observamos que en todas las
definiciones de didáctica encontradas aparecen algunos de estos conceptos:
enseñanza, aprendizaje, ciencia, disciplina pedagógica, instrucción, formación,
medios.
Si lo que hacemos es un recorrido
histórico, vemos que la didáctica se ha centrado en enseñar y aprender, pero
estos dos procesos no siempre han sido entendidos de la misma manera. Para
esto, tal y como nos cuenta Tejada Fernández, es realmente interesante observar
la propuesta de evolución espiral del conocimiento en didáctica elaborada por
Torre (1993), catedrático de Didáctica e Innovación Educativa en la UB. Torre define el concepto de didáctica en cuanto a distintas
fases que se han ido sucediendo a lo largo del tiempo, comenzando con
Grecia y Roma y llegando a la actualidad (fase pre-artesanal, artesanal,
metódica o instrumentadora, de explicación filosófica, aplicativa, explicativa y normativa, epistémica o fase de paradigmas de
racionalidad). No vamos a describir cada
una de ellas pero, hay que admitir que gracias a este trabajo hemos podido ver
no sólo cómo ha ido evolucionando el concepto de didáctica, sino también cómo
lo han hecho los principales agentes implicados en ésta: docente, discente, contexto
social, método, currículo.
En la primera de las fases, que
Torre denomina pre-artesanal, la didáctica pone el acento en el contenido, en
el objeto a transmitir. El docente pasa de ser un vehículo neutral en esta fase, a tener una gran importancia en
las siguientes entendiéndolo como el poseedor del conocimiento, el experto, el
técnico o el sabio con autoridad moral. Es a partir de la tercera fase o fase
metódica cuando comienza a disminuir levemente su protagonismo, (pues sigue
teniendo un papel importante). Este cambio, será propiciado por la revelación
de una nueva preocupación: el método, el cual había sido olvidado por completo
en las primeras fases como sucede con el discente que tiene un papel totalmente
pasivo durante largo tiempo. Encontramos a mediados del siglo XVI importantes
aportaciones respecto al método como el “Tratado de enseñanza” de Luis Vives,
el “Memorial” de Ratke o la famosa “Didáctica Magna” de Comenio. No obstante, no es hasta el siglo XVIII cuando
el discente empieza a figurar como elemento a tener en cuenta en el acto
didáctico. Rousseau establece la necesidad de conocer más y mejor al alumno (Tejada
Fernández, 2005) ,
pero sus principios serán llevados a la práctica muchos años después, esto es a
finales del siglo XIX, cuando aparecen movimientos cuyo centro de interés será
el discente y se consolidan diversos principios como sociabilización,
renovación metodológica con juegos, individualización, etc. (por ejemplo el
método de proyectos de Kilpatrick, Montessori o el Plan Dalton
respectivamente).
En resumen, a lo largo de la
historia han estado presentes los tres principales agentes, sin embargo,
durante mucho tiempo la importancia recaía sobre el mismo. Poco a poco hemos
ido viendo como el discente, el cómo
enseñar y el qué enseñar han ido ganando más peso en esta ciencia. Visto de
otro modo, se podría decir, que lo que
entendemos como didáctica
diferencial y didáctica específica se va
abriendo un hueco al lado de la didáctica general, que históricamente siempre
ha estado presente. Esto es así, puesto que esta clase o tipo de didáctica hace
referencia al plano teórico, al conjunto de normas o principios en que se fundamenta el proceso enseñanza-aprendizaje.
Mientras que la didáctica diferencial se aplica más específicamente a
situaciones variadas de edad o características de los sujetos y la didáctica
específica o especial trata de la aplicación de las normas didácticas generales
al campo concreto de cada disciplina o materia de estudio. (Mallart,
2001)
En definitiva, tras este
recorrido y leyendo diversas definiciones, podemos entender y definir
la didáctica de forma general como una ciencia que se encarga o que
interviene en el proceso de enseñanza y aprendizaje y cuyo fin u objetivo que es la formación o
instrucción del discente. Nos ha
resultado muy llamativo que se haya apartado tan descaradamente a un lado la
figura del discente y el método, y consideramos que aún hoy todavía se puede realizar más cambios al
respecto. No debemos olvidar, por otro
lado, el debate suscitado actualmente por las nuevas tecnologías. Podríamos
decir que gracias a estas se ha actualizado una parte de la didáctica
específica, pero queremos destacar que sería necesario llegar a un consenso total en cuanto al
manejo de las TIC. Lo que queremos decir
es, como en todo, que de la teoría a la práctica hay un trecho y, a
pesar de que se ha avanzado significativamente, todavía hay trabajo por hacer. Antes
de terminar, queremos subrayar también, la importancia de que la formación no
ha de ser sólo intelectual, sino que debe haber una formación personal-social y
emocional.
Añadimos algunas de las definiciones de didáctica
encontradas que nos han parecido interesantes:
Fernández Huerta:
· "La Didáctica es la ciencia que estudia el
trabajo docente y discente congruente con los métodos de enseñanza/aprendizaje.
Su fin es la instrucción" (1964).
· "La Didáctica se preocupa de estudiar el
trabajo discente congruente con el método de aprendizaje y, por extensión,
recoge el trabajo docente coligado con el anterior" (1970).
· "La didáctica tiene por objeto las
decisiones normativas que llevan al aprendizaje gracias a ayuda de los métodos
de enseñanza" (1985).
Nerici:
· "La Didáctica es ciencia y arte de enseñar.
Es ciencia en cuanto investiga y experimenta nuevas técnicas de enseñanza. Es arte cuando
establece normas de acción o sugiere formas de composición didáctica, basándose en datos científicos y
empíricos de la educación" (1969).
· "La Didáctica es el conjunto de técnicas a
través de las cuales se realiza la enseñanza; para ello recurre y coordina, con
sentido práctico, todas las conclusiones y resultados que llegan de las
Ciencias de la Educación, a fin de que dicha enseñanza resulte más eficaz"
(1973).
Villalpando:
"La didáctica es… la parte de la pedagogía que estudia
los procederes para conducir al educando a la progresiva adquisición de
conocimientos, técnicas y hábitos, así como la organización más conveniente del
contenido que ha de ser asimilado y los elementos con que se ha de auxiliar
educador" (1970).
Villar
Angulo:
"Sitúo
la Didáctica dentro de las Ciencias de la Educación que explica y estructura
metódicamente el proceso instructivo, y que también analiza, dando lugar a
distintos modelos de currículum y de enseñanza ... y como consecuencia de su
proyección normativa y de su carácter tecnológico y científico, estudia la
enseñanza desde el punto de vista de la práctica escolar" (1990).
Medina:
"La Didáctica es
una disciplina pedagógica que analiza, comprende y mejora los procesos
enseñanza-aprendizaje, las acciones formativas del profesorado y el conjunto de
interacciones que se generan en la tarea educativa" (1995).
Tejada:
"La Didáctica es una ciencia aplicada que tiene
por objeto el proceso de instrucción formativa integral e integrada
posibilitando la aprehensión de la cultura y el desarrollo individual y social
del ser humano" (1999).
Sevillano:
"La
Didáctica es la ciencia teórico-normativa que guía de forma intencional el
proceso optimizador de la enseñanza-aprendizaje, en un contexto determinado e
interactivo, posibilitando la aprehensión de la cultura con el fin de conseguir
el desarrollo integral del estudiante" (2004).
Referencias bibliográficas:
Mallart, J. (2001). Didáctica: Concepto, objeto y
finalidades. En Didáctica General
para Psicopedagogos (págs. 23-57). Madrid: UNED.
Tejada Fernández, J. (2005). Didáctica-Curriculum.
Diseño, desarrollo y evaluación curricular. Barcelona: Davinci.
sábado, 27 de diciembre de 2014
¿Qué son los informes PISA?
¿Qué son los informes Pisa?
Si todavía no lo tienes claro, mira este vídeo que lo explica muy bien.
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